Año nuevo

Esta es la primera publicación de este año y no sé como iniciar. Es 4 de Enero y son más de las diez de la noche, aún no sé si esta noche lograré conciliar el sueño como noches anteriores o por el contrario el insomnio volverá y no habrá remedio alguno.

La música se ha detenido y a mi alrededor sólo hay silencio, miento, si me concentro, puedo escuchar el tic tac del reloj. Un sonido que me parece bastante molesto y sólo cuando siento mi respiración lo logro percibir. Quién diría que mi reloj de pulsera lograría hacer eco en mi conciencia.

Tengo la cabeza embolatada y no hay mejor remedio que escribir, a diario lo hago, es un ejercicio que me sirve para aclarar mi cerebro y poner algunas ideas o pensamientos sobre el papel, es una forma de ejercitar mi memoria y de reencontrarme en ciertas ocasiones, hay puntos en mi vida en los que la escritura ha sido mi tabla de salvación y me ha llenado de muchas sensaciones diferentes. Bien sabes querido lector que este espacio es diferente a las pequeñas libretas que abundan en mi casa dónde se encuentran mis más obscuros pensamientos. Hoy quiero intentar algo diferente. ¿por qué? porque me siento diferente y eso, eso siempre es bueno.

Ya son más de las 11 de la noche y la historia que está hilando mi cabeza no está lista, quizá en algún momento decidiré publicarla, pero hoy no va a ser la noche. Espero que cuando lo haga, para quien la escribo la encuentre y se sienta identificado. Aunque, la posibilidad de que eso sucede es mínima. ¿por qué? porque mi imaginación está haciendo de las suyas y está distorsionando un sólo evento en muchos más.




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